Elegir un software inmobiliario adecuado puede convertirse en una ventaja competitiva ya que aumenta la eficiencia de la empresa y la satisfacción del cliente. Una buena funcionalidad del mismo conlleva un ahorro de tiempo y costes. Además, puede ayudar a mejorar la comunicación con el cliente, a reducir la carga de trabajo y, con ello, a optimizar la actividad comercial.
Según un informe de National Association of REALTORS:
Casi la mitad de las empresas consideran que el mayor desafío al que se enfrentarán en los próximos años son las nuevas tecnologías
Dentro del sector inmobiliario, uno de los retos más importantes consiste en elegir un software inmobiliario apropiado.
Por estos motivos, es importante analizar qué tener en cuenta a la hora de elegir un software inmobiliario que se adapte a las necesidades de la empresa.
¿Cómo elegir un software inmobiliario?
Cuando decidimos incorporar un software inmobiliario a nuestro sistema de trabajo, hemos de asegurarnos de obtener con él una mayor productividad. Para ello, hay que tener en cuenta una serie de características que son principalmente las siguientes:
Funcionalidad
La idea de adquirir un software implica que este nos haga más fáciles nuestras tareas. Por ello, es fundamental que nuestro software inmobiliario sea ante todo fácil, útil y cómodo de manejar.
Sin embargo, la sencillez de uso no debe significar que el software sea simple o se limite a unas funciones básicas; la sencillez no está reñida con la potencia ni la capacidad, y un software interesante debe saber integrar esas características.
Por tanto, la presencia de un sistema intuitivo, sincronizado en todo momento y que funcione con fluidez será un elemento a considerar a la hora de escoger nuestro software. Y también ha de cumplir con todas las necesidades que tenemos como empresa inmobiliaria. Además, es muy conveniente que sea multidispositivo y así lo podamos usar desde cualquier lugar, ya sea desde el ordenador, la tablet o el teléfono móvil.
Mejorar las relaciones con el cliente
Otra cuestión que se ha de valorar es que los clientes son la base del negocio. Por este motivo, un gestor de relaciones con ellos es imprescindible en el software. Las características que debe tener un CRM inmobiliario son las siguientes:
- Administración de datos de contacto: tiene que facilitar la gestión de la información de los clientes, recopilar nombres, teléfonos, direcciones de correo electrónico, etc. Un CRM, por ejemplo, puede encargarse de mantener accesible y organizada toda la comunicación con los clientes así como de realizar envíos automatizados de respuestas.
- Actividad asociada al cliente: poder llevar a cabo un seguimiento de cada cliente y saber en qué parte del proceso (visita, negociación, reserva, venta…) se encuentra nos puede ser de gran ayuda.
- Recopilación de la historia de clientes potenciales: realizar un seguimiento de la actividad y posibles demandas de inmuebles del cliente potencial es esencial para conocer sus preferencias y responder ante ellas.
Gestión y tareas agilizadas
Lograr agilidad en las gestiones y tareas diarias que tenemos que abordar será un punto clave para reducir la cola de trabajo y permitir dedicar nuestro tiempo a la actividad comercial.
Es importante asegurarse de que la herramienta que elijamos nos permita gestionar los bienes inmuebles de forma que se puedan controlar todos los aspectos relacionados con la adquisición, mantenimiento y venta de los mismos. Pero, además, también nos debe ayudar en el resto de tareas que, como inmobiliaria, hemos de realizar.
Por ello, a la hora de elegir un software inmobiliario se ha de valorar que permita:
- Controlar los inmuebles y sus características: tener accesible y organizada toda la información relativa a los inmuebles es un elemento fundamental que debe ofrecernos un software inmobiliario.
- Gestionar los documentos: una fácil gestión de archivos relacionados con la adquisición, mantenimiento y venta de los bienes inmobiliarios y su organización en una misma plataforma nos ahorrará tiempo y problemas relacionados con la pérdida de documentos. Además, la administración y almacenamiento de los contratos nos facilitará la gestión de este tipo de documentos, que siempre suele ser una parte tediosa de los cierres de la venta.
- Administrar nuestras tareas: mantener organizada nuestra agenda y recibir avisos de cuestiones pendientes es esencial para que nuestro trabajo se desarrolle con fluidez.
- Facilitar el marketing y la difusión: un software inmobiliario puede llegar a gestionar notificaciones directas y personalizadas con el cliente, compartir los inmuebles en las redes sociales o portales inmobiliarios en un par de clics e imprimir cartelería personalizada para nuestra oficina física.
Seguridad
Contar con protocolos de seguridad como HTTPS es otra característica para tener en cuenta al elegir un software inmobiliario. Solo así podremos garantizar la seguridad de nuestros datos. Esto es, además, un aspecto que nuestros clientes saben valorar.
Inmoenter es un software inmobiliario multidispositivo que cuenta con todas estas características. Al facilitar la relación con el cliente, así como las tareas y gestiones que debemos realizar, permite agilizar los procesos y centrar la actividad en ofrecer un asesoramiento personalizado al cliente para cerrar más ventas.
Consigue ahora el software más adecuado para aumentar la productividad de tu inmobiliaria.